Fue procesado el Obispo Garlatti por encubrir al sacerdote Vara
El juez federal subrogante de Bahía Blanca Álvaro Coleffi procesó ayer a la mañana al arzobispo de Bahía Blanca Guillermo Garlatti, porque lo consideró “prima facie autor penalmente responsable del delito de encubrimiento agravado en su modalidad de favorecimiento personal en concurso real con el delito de desobediencia”, además no le dictó su prisión preventiva y fijó su responsabilidad civil en 7000 pesos. El juez considera que Garlatti colaboró con el el excapellán del 5º Cuerpo del Ejército Aldo Vara, quien permaneció prófugo durante casi un año y murió a principios de este mes en Paraguay, mientras esperaba ser extraditado hacia nuestro país. Según informó el portal bahiense "La Brújula24", para el juez Coleffi, monseñor Garlatti ocultó valiosa información sobre el sacerdote Vara y le prestó ayuda económica. Esto fue porque cuando el juez le requirió al Arzobispado información sobre la pensión que cobraba Vara no se la entregaron, pero esa documentación después fue secuestrada durante un allanamiento posterior en la Curia. Así el Arzobispado de Bahía Blanca en diciembre pasado contestó que "a la fecha de hoy no se ha recibido en este Arzobispado solicitud alguna para trasladarse al exterior, por lo que reitero que se desconoce al actual paradero del Padre Vara". Además, el juez Coleffi destacó que la documentación que daba cuenta sobre domicilios en los que Vara podría encontrarse fue hallada durante el allanamiento "en la Secretaría del Arzobispado y no en la Administración".
En la declaración indagatoria el obispo se habría defendido argumentando que no le parecía importante informar que desde su Curia todos los meses un apoderado del prófugo pasaba a cobrar $2.400 de un fondo económico que habitualmente reciben los religiosos mayores de 70 años (Fondo Integral de Solidaridad, Fides). Por eso el juez también procesó al empresario Leopoldo Bochile, quien era precisamente el apoderado del prófugo y retiraba en el arzobispado un cheque a nombre de Vara.
En su resolución el juez dijo "No hablamos de un delito común cuyo conocimiento puede escaparse a la consideración general. Estamos hablando de un clérigo incardinado en el Arzobispado local, imputado de lesa humanidad, sobre el cual se decidió no dar toda la información que existía en el Arzobispado. Desconocer esta trascendencia, o esta dimensión, es intentar explicar lo inexplicable. Ni la Justicia, ni el Ministerio Público Fiscal, ni la propia Iglesia, ni los organismos de derechos humanos pudieron estimular y obtener una respuesta completa del Arzobispado en el que estaba incardinado el ahijado prófugo"
0 comentarios:
Publicar un comentario